Tenerife es algo más que mar y playas. En la isla más grande de las Canarias le espera un derroche de colores y plantas en medio del relieve volcánico. El interior de la isla se caracteriza por una sugestiva alternancia de tierras desérticas y relieves rocosos cubiertos de lava, entre los que destaca el volcán Teide (el tercero más grande del mundo). El Parque Natural de la Corona Forestal es ideal para descubrir todo esto a través del senderismo.
Más al oeste de la costa se encuentra Los Gigantes, una localidad costera en la que se pueden admirar los gigantescos acantilados que caen en picado sobre el océano, que son aún más espectaculares de cerca y que se pueden ver desde el mar en una excursión en barco.
En el norte de la isla se encuentran las ciudades más importantes de Tenerife: Santa Cruz y San Cristóbal de La Laguna, que podrá conocer y descubrir a través de las calles del centro, flanqueadas por casas de estilo español, y experimentar al máximo en las tiendas, cafés y restaurantes típicos.
Las playas son en su mayoría de arena oscura de origen volcánico y las aguas son de un azul intenso. La única playa con arena dorada es la Playa de la Teresitas, formada con arena importada del Sahara.
Tenerife también es conocida por su animada vida nocturna, en la que los balnearios cobran vida al ritmo de la música y la fiesta dura toda la noche en las discotecas de las ciudades más importantes.
El clima de Tenerife es suave durante todo el año y no hay inviernos. Las temperaturas diarias rondan los 29°C en verano y los 20°C en invierno, mientras que los vientos soplan constantemente desde el este y el noreste. El norte de Tenerife es más fresco y lluvioso, mientras que el sur es más seco y cálido. Las precipitaciones se concentran en los meses de noviembre a febrero y rara vez son abundantes, con una media de 5 cm de lluvia al mes durante este periodo, mientras que de abril a septiembre predomina un clima seco. Hay que tener en cuenta que en el sur de Tenerife las temperaturas estivales pueden alcanzar los 40°C en agosto, especialmente en los días en que la isla es alcanzada por los vientos cálidos del Sahara.
La temperatura del agua del mar en Tenerife oscila entre un mínimo de 20°C en abril y un máximo de 25°C en septiembre.
La época ideal para viajar a Tenerife es a finales de la primavera y principios del verano o en septiembre y octubre para evitar el excesivo calor estival. Los meses de invierno no son ideales para unas vacaciones en la playa debido a la frecuente nubosidad, pero son agradables para los que quieren descubrir la belleza natural de la isla.
No sólo uno de los eventos más importantes de las Islas Canarias, sino también uno de los más importantes del mundo: el carnaval de Santa Cruz de Tenerife, sólo superado por el de Río de Janeiro. Cada febrero, al mismo tiempo que Brasil y todos los carnavales del mundo, las calles de Tenerife se llenan de coloridas máscaras y carrozas durante todo un mes, una extraordinaria fiesta organizada sin restricciones, casi exagerada y naturalmente transgresora. Pero el momento culminante es el desfile oficial, cuando se elige a la reina del carnaval en torno a las fechas del mismo.
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